El mercado de las tarjetas gráficas es un tema delicado para todos los gamers de PC. Viéndose presa del desabastecimiento y la inflación, los precios de uno de los componentes principales de cualquier ordenador para jugar se han visto disparados en los últimos años. Lejos de acabarse esa situación, parece que AMD está preparada para aumentar (de nuevo) el precio de sus productos.
La noticia viene de la mano de los compañeros de Videocardz, que se sumergieron en el foro chino Boardchannels. Allí, se afirma que AMD ha comunicado a todos sus colaboradores y fabricantes que planean incrementar el precio de sus GPU en un 10%. La razón viene de la mano de TSMC, el fabricante de chips que trabaja con gigantes como Apple, Nvidia y, obviamente, AMD. Gracias a la gran demanda, la empresa ha ido subiendo los precios de sus componentes, y esto, a su vez, ha generado costes en toda la cadena.
Este incremento no repercutiría ya mismo, pues tendría que ver con el siguiente cargamento de gráficas, el cual tardará un par de semanas en llegar a los vendedores. Siendo pesimistas, no sorprendería a nadie que algunos intentasen ajustar estas cantidades ahora, aprovechando la noticia y la actual situación de desabastecimiento.
Por otro lado, si bien es verdad que esta subida viene de mano de AMD y afectará a los fabricantes de gráficas (como Gigabyte o Sapphire), ya sabemos cómo funciona esto y estos costes irán moviéndose hasta llegar a los consumidores. En el peor de los casos, es posible que en alguna parte de esta máquina, alguno de sus engranajes decida que ese 10% debería ser un 11 para rascar algo más de beneficio y comenzase un pequeño efecto dominó, aunque eso solo es especulación.
Sea como fuere, la situación en la que nos vemos envueltos los jugadores de PC está lejos de terminar. Hace unos días, hablábamos del punto de vista del CEO de Nvidia, que cree que esto no solo va a durar hasta pasado 2022, sino que tiene sus dudas sobre el efecto a largo plazo o permanente que pueda tener la falta de suministros, el aumento de la demanda y la especulación con los bienes.