Ni los mejores videojuegos de la historia se salvan de tener sus peros. Super Mario 64 podría utilizar una mejor cámara, Bloodborne podría tener mejor framerate, el combate en Baldur's Gate 2 no ha envejecido bien y las voces de Silent Hill 2 no son una maravilla que digamos. Nadie se salva, y The Witcher 3, uno de los mejores RPGs de la historia de los videojuegos, también tiene sus cosas.
Y es que, si como yo, te ves casi obligado a visitar todos los puntos de interés que aparezcan en el mapa de tus juegos de mundo abierto, seguro que te has sentido frustrado por culpa del RPG de CD Projekt. Una infinidad de signos de interrogación llenan las tierras de esa aventura, y hoy sabemos la curiosa historia tras esta decisión.
Hace poco que se cumplieron los 20 añazos de CD Projekt, y por ello decidieron realizar un directo especial con algunas de las figuras centrales de la empresa. Entre ellas está Philipp Weber, el director de campaña y jefe de diseño de misiones del próximo The Witcher. Puede que ahora tenga un gran puesto dentro de la compañía, pero en 2014, cuando The Witcher 3 estaba siendo desarrollado, era un diseñador junior.
Según comentó, uno de los grandes arrepentimientos que tiene en cuanto al trabajo que realizó tiene que ver con las decenas y decenas de interrogaciones que marcan los cofres escondidos del tercer Witcher. Según cuenta, en un principio no iba a haber marcas, sino que simplemente habría que ser observador para recibir estas recompensas.
Dado el tamaño del mapa y lo vacío que se veía con solo las misiones y puntos de interés ahí, CD Projekt decidió, pocos meses antes del lanzamiento del juego, que necesitaba más elementos, y por eso se tomó la decisión de añadir las interrogaciones. Weber, por su parte, dice que si pudiese volver a trabajar en TW3, no haría las cosas exactamente igual.
Sin más datos sobre The Witcher 4, al menos podemos intuir que su mapa tendrá menos relleno y más sustancia. Todos estamos expectantes por saber más del nuevo juego de la saga, pero habrá que armarse de paciencia hasta que el estudio polaco, que no está en su mejor momento financiero, decida pronunciarse al respecto.