Mucho se está hablando de PlayStation últimamente. Más concretamente, de la estrategia que está siguiendo como marca a la hora de dar el salto a PC. Poco a poco, Sony ha ido potenciando sus lanzamientos en otras plataformas, declarando, inclusive, que quería ser más agresiva con todo este proceso. Algo que muchos adscribieron a la evolución natural de las cosas, pero lo cierto es que los motivos parecen ser un poco más funestos de lo que cabría esperar.
Por supuesto, esta consideración no nace de ningún tipo de declaración que proceda de la propia compañía, sino de las impresiones que me ha generado una de los últimos análisis publicados en Newzoo. Según ellos mismos informan, cuando se habla en términos globales, la industria del videojuego ha generado 183.900 millones de dólares en 2023, llegando a una conclusión muy interesante: el mercado de videojuegos es el que más y mejor está creciendo, aunque no es una cuestión tan simple.
PlayStation, obligada a dar el salto a PC
Gráfica de ventas vía Newzoo.
Durante la pandemia, la situación fue —cuando menos— compleja y, de hecho, llevamos un par de años viendo sus consecuencias: despidos, cierres de estudios, reestructuraciones, etc. Curiosamente, parece que las cosas no van tan mal. Al menos no en todos los sectores cuando hablas única y exclusivamente de ganancias. Según explican en Newzoo, "de 2021 a 2022, los ingresos del mercado de los juegos se redujeron, aunque ahora lo definimos como un año de recuperación para la industria. El mercado se estabilizó en 2022 y comenzó a crecer nuevamente en 2023".
Lo interesante es la forma en la que el mercado dice crecer. Si miramos la gráfica que ellos mismos expresan, y teniendo en cuenta que no entran dentro de la ecuación las ventas de hardware, los juegos de consola siguen estando por encima de los de PC. En total, el 28% de los ingresos generados pertenecen a estas, mientras que en PC se reduce al 22%. Por su parte, los juegos de móviles siguen gobernando el mercado. Pese a ello, hay interpretaciones muy curiosas cuando hablamos de porcentajes de crecimiento.
En la comparativa directa frente al ejercicio de 2022, observamos una dinámica muy concreta: PC es la plataforma que más ha crecido, puesto que ha generado un 8,4% que en el susodicho ejercicio. Por su parte, el crecimiento en consolas es prácticamente irrisorio, pues apenas es del 0,3%. Para mi sorpresa, en móviles han generado menos, ya que estamos en un -2,1%, mientras que los títulos de navegador siguen quedando en un plano muy secundario con cada vez más importancia.
Ahora bien, ¿por qué digo que PlayStation está dando el salto a PC por obligación, no por gusto? Desde tiempos inmemoriales, PlayStation se ha definido como uno de los ecosistemas más cerrados del mercado junto a Nintendo. En general, y no lo digo con connotaciones negativas, es una empresa bastante recelosa con sus exclusivos. Durante años, se ha negado a dar el salto a PC, pero con la nueva generación decidió hacerlo. Ahora, y desde hace bastante tiempo, hemos podido disfrutar de algunos de sus mejores exclusivos.
No obstante, esto no es por amor al arte y estoy completamente convencido de que lo evitarían en caso de ser posible. ¿En qué me baso? Por ejemplo, en la imperiosa necesidad que parecen tener a la hora de ligar las cuentas de PSN a sus títulos más recientes, tenga las consecuencias que tenga. Ya vimos que con Helldivers 2 se desató una polémica brutal y que con Ghost of Tsushima han dejado fuera de la ecuación a posibles usuarios de varias decenas de países.
Es decir, que no parece un cambio que estén haciendo de buen grado, ya que da la sensación de que quieren aumentar los números de PSN a como de lugar. Esto es lo que me hace pensar en que el salto a PC es obligado. Como bien sabréis muchos de vosotros, los despidos y los cierres de estudios están siendo casi una constante en prácticamente todas partes. Las cosas no van tan bien como parecen, puesto que podría ser sinónimo de que la burbuja que se generó durante la pandemia está explotando de la peor manera posible.
Si sumamos a esto el hecho de que PC es la única plataforma que está creciendo de verdad, con valores realmente significativos y cifras importantes, parece obvio que se enfrenten a esa necesidad. La única que se escapa en ese sentido es Nintendo, pues juega en otra liga diferente y Nintendo Switch sigue yendo como un tiro. Es más, está a punto de convertirse en la segunda (o primera) consola más vendida de la historia. Mientras, PS5 sigue muy por detrás. En sus cuatro años de vida ha obtenido buenas cifras, con casi 60 millones de ventas, pero está muy lejos de los 140 millones de Nintendo Switch en siete años.
Las previsiones no indican que la cosa vaya a cambiar demasiado, aunque con PS5 Pro las cosas deberían dar un vuelvo. Al menos eso es lo que parece. Sea como fuere, la sensación es la misma. Sobre todo si nos remitimos a las cifras del análisis de Newzoo. Cuando nos volvemos a fijar en él, parece muy claro que (y no tan poco a poco) plataformas como Steam, GOG o Epic Games le están arrebatando el segundo puesto al mercado de consolas y que dentro de poco se convertirán en una referencia más importante, o con el mismo peso, que estas. Así pues, que PlayStation quiera acelerar el proceso e integrarse con la comunidad de PC no es una casualidad, es una necesidad impuesta por la forma en la que está evolucionando el mercado de los videojuegos.
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