Estamos en junio y eso significa eventos a mogollón, pero este año hay uno que se mantiene ajeno y que no hará acto de presencia: el E3. Este es el primer año que la ESA decide cancelar su evento más importante, y de los más notorios del videojuego, por decisión propia —el pasado 2020 tampoco hubo celebración, en este caso por las medidas sanitarias de la pandemia—, por lo que el futuro de este acontecimiento ha estado en duda durante meses.
Si bien la propia Entertainment Software Association ya aseguró que esta ausencia vendría compensada por un retorno triunfal el próximo 2023, nunca está de más asegurarlo, ampliar expectativas y, sobre todo, dejarlo claro. Así pues, y según palabras de Stan Pierre-Louis, director ejecutivo de la ESA al medio estadounidense The Washington Post, el E3 volverá más fuerte que nunca y en formato presencial.
“Por mucho que amemos estos eventos digitales, y por mucho que lleguen a las personas y queremos ese alcance global, también sabemos que hay un deseo muy fuerte de que las personas se reúnan, para poder verse y hablar sobre lo que hace que los juegos sean geniales”.
Estas palabras hacen mención al evento del pasado E3 2021 donde la ESA asumió un formato completamente online ante los coletazos de la reciente cuarentena por COVID del año anterior. Sin embargo, el medio estadounidense decide ir un poco más allá e indagar en los supuestos problemas que la organización parecía esconder tras sus puertas antes de la cancelación de la ceremonia de este año.
Ante esto, Pierre-Louis se ha negado a responder y recupera el discurso del problema técnico y sanitario al que se han enfrentado estos últimos años a causa de la pandemia. Sin embargo, y mientras la ESA ha dado un paso atrás, el Summer Game Fest de Geoff Keighley se ha mantenido estoico y para algunos se ha convertido en un "sustituto del E3". No obstante, el directivo defiende un formato "más clásico", asegurando que "hay un espacio para un espectáculo físico; aunque es importante tener alcance digital".
Esto no quiere decir que el futuro del E3 pase por ser exclusivamente a puerta cerrada, sino que para la ESA, ese "retorno a lo clásico" implica recuperar el mismo formato que durante años ha primado en los eventos de verano; con una entrada abierta para la prensa, mientras los jugadores pueden seguirlo desde casa. Solo cabe esperar cuál es la repercusión del inminente Summer Game Fest en comparación con, por ejemplo, la Gamescom 2022 que esta sí se realizará de forma híbrida.