2021 ha sido un año aciago para el desarrollo de videojuegos. La situación de cuarentena del pasado 2020 ha retrasado el trabajo de cientos de empresas priorizando la salud de sus trabajadores, algo que desde aquí nos congratula, pero ha hecho que ciertos videojuegos tengan que moverse en el calendario. El último en sumarse a la lista es el remake de Saints Row que no llegará finalmente el 25 de febrero, evitando coincidir con el lanzamiento de Elden Ring.
Volition Studios, desarrolladores de la saga original de Saints Row, ha anunciado que necesitan algo más de tiempo para mejorar el juego y su nueva fecha de lanzamiento será el 23 de agosto de 2022. Un retraso de seis meses para dar una segunda vuelta y corregir errores de este reinicio de una de las sagas sandbox más locas y divertidas del mundo del videojuego.
"Si lo lanzamos en la fecha original, no estaría a la altura de los estándares que nos hemos fijado, y que vosotros esperáis y os merecéis", explica el equipo de Volition en un comunicado oficial. No obstante, la compañía estadounidense asegura que "no habrán muchos cambios en el juego fuera de la calidad y el pulido general", por lo que podemos esperar que este retraso de medio año sea el definitivo y finalmente podamos jugar Saints Row en verano de 2022.
A pesar de que este retraso nos entristece, Saints Row se pierde un comienzo de año repleto de videojuegos y muy competitivo con grandes lanzamientos como Elden Ring o Dying Light 2. Este Saints Row se ha concebido como un reboot de la saga principal y nos llevará a la región de Santo Ieso, inspirada en el suroeste estadounidense. Volition ya aseguró el pasado verano que estaríamos ante una entrega completamente diferente, con más opciones de personalización que nunca, diversas facciones y un mundo abierto vivo que dará gusto explorar.