Es muy difícil no encontrar un RPG de corte clásico que te pueda ofrecer algo que innumerables ''hermanos'' suyos no te hayan presentado ya. Al final, la decisión de escoger uno se basa principalmente en su ambientación o trama, ya que hay juegos como Baldur's Gate 3 que parece que no han dejado piedra sin remover en lo referente a presentar su oferta jugable. Pero incluso dentro del supuesto ''montón'' (y lo digo con comillas por el respeto que merecen los menos conocidos), puede haber joyas que se te pasaron por alto.
Un ejemplo clarísimo y que engaña al principio porque piensas que va a ser uno más es Pathfinder: Wrath of the Righteous. Este videojuego es el último de una saga que nació como un juego de mesa tradicional de rol pero que debido a su popularidad fue adaptado al formato digital con Kingmaker, su antecesor. Pero esta secuela es mucho más ambiciosa, completa, larga y variada, demostrando que cuando Owlcat Games se propone crear y representar un mundo de fantasía en un juego, lo hace a conciencia.
Multitud de caminos y consecuencias
Y mencionando de nuevo al sacrosanto juego de Larian Studios, parece que sólo pueda ser el que ofrece una trama con más ramificaciones de las que te puedes imaginar. Y ojo, no digo que no, Baldur's Gate 3 necesita de jugarse muchas veces para comprobar cada decisión y consecuencia, y algunas de ellas afectarán a tu personaje. Pero es que en Wrath of the Righteous es un no parar.

Por poneros un ejemplo, podemos construir a nuestro personaje de entre un abanico de más de 25 arquetipos con variaciones de raza y trasfondo -algo muy fiel a la flexibilidad de los juegos de rol a la hora de escribir esa ''hoja de personaje''-, pero es que durante todo el título y el desarrollo de su trama (manida hasta la saciedad en forma de invasión demoníaca en un mundo de fantasía, eso sí) no cesamos de encontrarnos con encrucijadas en el terreno de las decisiones en forma de dialogo o acciones.
Decisiones y acciones que pueden afectar a lo que tu personaje puede aprender o no. No os preocupéis que no hay una elección incorrecta, y el juego te indica qué consecuencias tendrá para tu personaje realizar esas elecciones, pero es que hay tantas que pide a gritos una segunda partida o una tercera.

Incluso los villanos del juego, cuando empiezas a entrar en contacto con ellos demuestran tener unos diálogos, planteamientos y propuesta de decisiones excelentemente bien escritas. Fijaos incluso que es posible cambiar de bandos en algún punto de la aventura ya que hacen que veamos la lógica de sus acciones. Todo eso aderezado con combates y un sistema de juego que te permite elegir entre jugar en tiempo real o en clásico combate por turnos; ninguna de las dos posibles formas de juego se siente metida con calzador además.
Una macedonia de géneros
Y otro punto a favor de este Pathfinder: Wrath of the Righteous es el hecho de que, aunque mayoritariamente lleves un grupo que puede ir creciendo - o decreciendo por las traiciones o ajusticiamiento por tu mano de quienes intenten traicionarte-, llegará un punto en el que tendremos que tomar el mando de los ejércitos de uno de los bandos para ir liberando (o conquistando) este mundo de fantasía en el que nos encontramos.
No, no es que vayamos a tener un juego de estrategia con la profundidad de sus primos lejanos, pero el tener que gestionar las tropas -de las cuales somos generales- y planificar las conquistas realizando misiones nosotros mismos antes de lanzar el ataque principal sobre la ciudad o fortificación a liberar lo hace más atrayente aún; casi casi tienes dos juegos en uno.

Aparte que es en estas secciones donde el juego brilla con más espectacularidad gracias a la representación de sus combates; si ya es divertido y visualmente agradable el participar en las escaramuzas con tu grupo, aquí estamos hablando de batallas contra huestes de demonios que te hacen pensar en escenas de El Señor de los Anillos focalizadas en la batalla contra un grupo de enemigos.
Con lo cual, y si aún no lo habéis probado, es el momento perfecto para darle un tiento si buscáis algo distinto dentro del terreno de los RPG de fantasía oscura con un toque de estrategia táctica. Ahora mismo, está en GOG rebajado un 90% de su precio pero no durará mucho hasta que vuelva a su precio normal; con lo que os recomiendo que lo pongáis en vuestra lista de deseos.
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