Puede que la Steam Deck de Valve sea tu primer encuentro con los ordenadores consola en formato portátil, pero este esperado proyecto no se encuentra solo en esta escena. Rodeado de competidores, uno de los lanzamientos más esperados de este año tiene más rivales de los que preocuparse, pero también varias cartas que jugar.
Y es que, aunque ya hubiese presencia en el mercado de los PC consola con la GPD Win, la llegada de Nintendo Switch supuso un antes y un después en esta escena, probando dos cosas: que en el mercado hay demanda y que este tipo de productos tienen un atractivo especial. Plantear el poder llevarte tu biblioteca de Steam (y otro tipo de juegos) a cualquier parte es, francamente, algo mágico, y a eso es a lo que apuntan estos sistemas, a crear una experiencia inimaginable hace unos años.
Evidentemente, la atención que se le está poniendo al sector ha incrementado un montón desde el anuncio de Steam Deck, pero eso no significa que antes no hubiese una escena, aunque fuese de nicho, detrás de estos dispositivos. Al fin y al cabo, ¿quién no ha soñado nunca con poder jugar a todos sus títulos favoritos sobre la marcha? Halo Infinite en el metro, Serious Sam en el autobús o Final Fantasy XIV desde la cama son algunos ejemplos claros del potencial de este tipo de dispositivos.
Alternativas a la Steam Deck
Pero, quitando la Steam Deck, ¿qué otros productos habitan este mercado tan limitado y qué es lo que tienen que ofrecer ahora que un nuevo contrincante se ha unido a la batalla? Hoy toca hablar sobre GPD, AYA y OneX, tres empresas que tienen una visión sobre el potencial de los PC consola portátil, y que se enfrentan ahora a un contrincante inesperado.
GPD Win 3: juega, sí, pero con teclado físico y conectividad
A nivel de formato, la GPD Win 3 es posiblemente la más sorprendente de todas estas máquinas. Contando con un teclado físico (que se descubre deslizando la pantalla hacia arriba), y un dock que le permite tener todo tipo de conectividad USB para expansión, es la que se siente menos derivativa del grupo.
Cuenta con varias opciones de procesador, pero ambas portan un Intel de 11ª generación (un i5-1135G7, i7-1165G7 o I7-1195G7) y gráfica integrada Xe. En cuanto a RAM y almacenamiento, estamos ante una máquina que porta 16 GB de RAM DDR4 y 1 TB de almacenamiento por NVMe. Su pantalla, algo muy importante en este tipo de dispositivos, es de 5,5 pulgadas y cuenta con una resolución de 1280x720, convirtiéndola en la máquina más pequeña de todas. En general, es la más pequeña de todas y su precio comienza en los 799 euros técnicamente, pero en Europa la podemos conseguir por 1050 euros.
AYA NEO Next: la nueva generación
Contando con varios modelos también, la AYA NEO Next viene pisando fuerte, sí, pero no todo lo que podría. Pese a trabajar bastante de cerca con AMD, utiliza un Ryzen 7 5825U, sin haber podido llegar implementar los Ryzen 6000 que prometió. Si a esto le sumamos que su solución gráfica es una Radeon Vega 8, el peso de su procesador con arquitectura Zen 3 se ve mermado.
Eso sí, cuenta con dos modelos: el normal y el pro. La diferencia entre estos dos se manifiesta en la RAM (de 16 a 32 GB DDR4) y en el almacenamiento (de 1 a 2 TB con interfaz NVMe). Elijas el modelo que elijas, eso sí, su pantalla será de 7 pulgadas y su resolución de 1280x800. Por otro lado, estéticamente también sorprende por poder elegir varios colores. Su precio, más elevado aún si cabe que el de la GPD Win 3, comienza en los los 1335 dólares.
OneXPlayer: muchas opciones y altas prestaciones
OneXPlayer se centra en dar más opciones a los consumidores. Pudiendo optar por modelos con arquitectura de Intel o de AMD, trae alternativas para todos los gustos. Su modelo Intel cuenta con un i7-1195G7, mientras que en AMD tendrás varias opciones. Aquí podemos encontrar un modelo económico con un procesador Ryzen 4800U, mientras que su versión más cara porta un 5700U.
En cuanto al resto de prestaciones, 16GB de RAM DDR4 y 1TB de almacenamiento NVMe. Sorprende la resolución de su pantalla, de 2560x1600 (con un tamaño de 8,4 pulgadas) y su increíble batería de 15 300 mAh, considerablemente por encima de sus dos rivales directas. Sí que es verdad que el modelo 4800U comienza en un precio más económico al de sus contrincantes: 999 dólares, pero las versiones más potentes elevan el coste a 1419, siendo la opción más cara de las tres. Pese a ser una máquina muy robusta en cuanto a prestaciones, cuesta justificar ese desembolso.
Por otro lado, OneXPlayer cuenta también con un modelo mini un poco más económico que sus versiones grandes. Cuenta también con un i7-1195G7 y 16 GB de RAM DDR4, pero su pantalla pasa de tener unas dimensiones de 8,4 pulgadas a 7, siendo considerablemente más pequeña que las otras alternativas.
Pese a que GPD, AYA y OneXPlayer no sean empresas sin recursos, está claro que Valve tiene una posición privilegiada a la hora de enfrentarse a su competencia. Ya solo su nombre hace que Steam Deck esté en boca de todos. Las publicaciones no gastan tantos recursos en cubrir los otros dispositivos, pues no tienen la misma tracción. Por si fuera poco, los consumidores se van a fiar más de la empresa que ha estado detrás de todas sus experiencias de gaming en esta plataforma durante años que de un fabricante al cual han oído nombrar por un artículo o un vídeo de YouTube.
La ventaja de Valve
Además de eso, a nivel de software, Valve es uno de los grandes pesos pesados del PC. Su uso de Linux y Proton para crear SteamOS le ha permitido hacer tremendos trabajos de optimización, tanto de uso de batería como de rendimiento, que simplemente no están al alcance de otros competidores, que tienen que "conformarse" con correr Windows corriente y moliente. Los rivales de la Deck, por poner un ejemplo, no pueden usar cartas como el FSR de AMD de manera nativa en todos sus juegos, cosa que esta nueva máquina tiene a su favor.
Eso sí, todo esto no significa que la Deck sea la reina indiscutible del mercado y el resto de dispositivos unas meras alternativas peores. Son productos robustos, con sus más y sus menos, que tienen su público. El problema, sobre todo, viene por el lado del precio. La última gran baza que tiene Valve a la hora de derrotar a sus rivales es su precio. Empezando en 419 euros y subiendo hasta los 679, incluso su modelo más caro resulta ridículamente económico para lo que puede ofrecer.
Aún así, va a haber que esperar para saber cuáles son los resultados de este duelo de titanes. Valve parece haber cogido el toro por los cuernos y llevado al mercado un portátil que viene a romper los esquemas y sorprender. Su Deck busca no solo hacerse con una parte de este pastel (algo que no me cabe ninguna duda que conseguirá), sino ser un producto abierto, con pocos secretos y que confía en sus usuarios para ser operado, modificado y reparado.