En 2015, Microsoft rompió uno de los récords más raros del mundo. Al menos si tenemos en cuenta que no parece estar demasiado relacionado con sus áreas de trabajo habituales. A fin de cuentas, ¿quién se iba a imaginar que la empresa detrás de Microsoft Windows, Microsoft Office o Microsoft Surface fuese a crear el lugar más silencioso del planeta Tierra? Pues sí, es así, y es tan silenciosa —válgase la redundancia— que nadie ha sido capaz de permanecer más de una hora en su interior.
Y aunque pueda parecer una tontería, el ser humano no está preparado para este tipo de ambientes. Acostumbrados a recibir estímulos auditivos de manera constancia, la ausencia absoluta de ruido es capaz hasta de volvernos locos. Hasta la fecha, según diversos registros y rumores, el récord está en unos 55 minutos. Otros señalan que el tiempo máximo está en 58 minutos. Según un artículo del Smithsonian, "el lugar más tranquilo de la Tierra te volverá loco en 45 minutos".
La habitación más silenciosa del mundo
Sin embargo, Microsoft no es la única empresa con una habitación parecida. Se llaman cámaras anecoicas y tienen diferentes funciones. Por ejemplo, en este caso en concreto, lo utilizan para realizar pruebas de sonido. Más concretamente, estudian qué tipo y cuánto ruido hacen los distintos elementos de sus diferentes productos al, por ejemplo, pulsar un botón para encenderlos, conectarlos a corriente, etc. A grandes rasgos, es una habitación que les permite determinar si el sonido que generan estos productos al realizar cierto gesto o movimiento es demasiado molesto. Por ejemplo, tuvo un papel clave con Cortana, ya que es donde se evaluó su comportamiento.
Para que os hagáis una idea, en su página web oficial, Microsoft ha montado una suerte de recorrido sobre la cámara en la que nos cuentan algunos de sus detalles más importantes. En este se revela que, en el interior de la sala, el ruido es de -20,35 decibelios. Esto también lo mostraron en uno de los muy diversos vídeos que han mostrado sobre la sala. Eso sí, es posible que les arrebaten este récord más pronto que tarde, puesto que Orfield Laboratories lleva un tiempo trabajando en otra cámara como esta, pero con un valor de -24,9 dB. Si se consideran válidos sus valores, el Libro Guinnes de los Récords podría otorgarles este honor dentro de poco.
Pruebas de Cortana
Para que os hagáis una idea, aunque es bastante complicado de hacerlo en realidad, Madrid en pleno día tiene una contaminación acústica de unos 65 dB, tal y como nos contaron tiempo atrás los compañeros de Xataka. Haciendo una regla de tres de aquella manera e ignorando otras cuestiones físicas, matemáticas, etc., podríamos decir que la cámara de Microsoft es cuatro veces más silenciosa que la capital española en hora punta.
Ahora bien, ¿por qué no podemos aguantar en su interior? Según explicó Hundraj Gopal en el vídeo anteriormente mencionado, hay tanto silencio que "cuando giras la cabeza, incluso puedes oír ese movimiento. Puedes escuchar tu propia respiración y suena un poco fuerte". Según recogió el New York Post, es incluso peor. Pasado un tiempo, empezarás a escuchar los latidos de tu corazón, los crujidos inconscientes de todos y cada uno de tus huesos o hasta el ruido que hace tu sangre al fluir por tus venas.
Hay gente incapaz de aguantar más de unos minutos y la mayoría de registros hablan de no más de una hora, al menos en palabras de los responsables de la susodicha sala. Sus creadores hasta explican que puedes volverte loco hasta el punto en que personas que han estado allí por menos de cinco minutos han necesitado algunas horas para recuperarse. O al menos en la mayoría de los casos, pues según el propio Gopal, hay gente que lo encuentra relajante. Eso sí, aclara que opina que si alguien pasase demasiado tiempo allí, se volvería (en efecto) loco.
Mediciones de sonido
"Lo encuentran relajante. Lo más que he visto a alguien permanecer dentro es una hora, y fue para recaudar el dinero para la caridad. Creo que si te pasas demasiado tiempo allí te volverías loco. Cada vez que tragas se escucha muy fuerte", recogió la BBC. Así que sí, existe una habitación ultrasilenciosa en la que Microsoft prueba, por ejemplo, el ruido que hacen los teclados, el tono de voz de sus inteligencias artificiales y otros productos para encontrar el punto justo en el que, según la ciencia, estaremos cómodos, distinguiendo entre sonido y ruido.
Sobre su construcción, hablamos de una sala en la que se usaron seis capas de acero y cemento rodeado por una matriz de muelles que se ocupan de amortiguar cualquier tipo de vibración y con paneles de fibra de vídeo en las paredes y el suelo que se ocupan de amortiguar y eliminar cualquier tipo de sonido que pueda introducirse en la sala. Se estima que costó un millón y medio de dólares y que es un área indispensable para la empresa.
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