Con la llegada de la pandemia, el mercado de las tarjetas gráficas vio ante sí un boom sin precedentes, impulsándose las ventas de estos componentes hasta un techo de disponibilidad que puso en jaque a todos los gamers en pos de favorecer la demanda de quienes buscaban aprovechar la moda de las criptomonedas. Ahora, unos años después, estamos a las puertas de un bajón proporcional.
El mundo entero se enfrenta a una recesión económica como consecuencia, en parte, de la crisis sanitaria de 2019, y el sector de las GPUs no parece irse a librar de ello, sino que puede ser una de las áreas tecnológicas que sufra el golpe más grande. Los últimos números así lo sugieren, siendo el tercer cuatrimestre de 2022 el que más reducciones para los fabricantes ha tenido desde 2009.
Según informan los compañeros del portal anglosajón Wccftech, las cosas se están poniendo muy feas para el mercado de las GPU dedicadas, golpeando especialmente a AMD que declara un 47,6% menos de stock enviado a vendedores en esta rama durante el cuatrimestre de 2022. Asimismo, rebaja su presencia en el mercado un 8,5%.
NVIDIA también se ve afectada por una situación nada positiva, que hace que su cuota de mercado se reduzca en 1,87%, y que, además, disninuye sus envíos en un 19,7%. El equipo verde parece haber podido utilizar las ventas de la RTX 4090 como colchón para evitar parte del impacto que ha recibido su rival directo.
Curiosamente, hay un tercer contrincante que también aporta sus datos, y en este caso son positivos. Se trata de Intel, el equipo azul, que se ha sumado recientemente a la guerra de gráficas reportar números positivos, aunque hay que tener en cuenta que esto es porque previamente no competía en el mercado de las GPUs dedicadas.
Estos datos son especialmente negativos para AMD, que está viendo reducciones de sus beneficios también en el ámbito de los procesadores. Viéndose forzada a descuentos en este ámbito, parece que la situación es complica de manera preocupante para el equipo rojo en todos sus frentes.