Todd Howard tenía las cosas claras con Skyrim: los dragones eran más importantes que los caballos, y casi los elimina por completo

Nos remontamos a 2009 durante el desarrollo de esta quinta entrega. La situación dentro de Bethesda es caótica, no tanto por problemas derivados del desarrollo de The Elder Scrolls V: Skyrim sino por las dificultades técnicas a las que se enfrentaba el equipo de desarrollo: conseguir integrar los caballos en el juego. Todos conocemos lo duros que son estos animales en Skyrim, no solo pueden escalar montañas sino que sobreviven a las caídas más inverosímiles. En cierta manera, este toque hilarante es marca de la casa del título, pero Todd Howard casi los elimina por completo del juego.

Así lo ha revelado el documental de Jonah Lobe, artista de Bethesda que trabajó en el desarrollo de este The Elder Scrolls V: Skyrim. En este video de una hora de duración, Lobe desgrana ciertos desafíos a los que se tuvo que enfrentar el equipo de desarrollo y uno de ellos era la imposibilidad de hacer funcionar correctamente el manejo de los caballos en el juego.

Según comenta Lianne Cruz, animador de Skyrim, en el documental: "Recuerdo que por un tiempo el caballo no estaba funcionando. Estábamos teniendo tantos problemas con él, tratando de hacer que pareciera normal montar a caballo con nuestro personaje. El caballo a veces era tan rápido que el mundo no cargaba a tiempo". Ante estos problemas Todd Howard, uno de los diseñadores principales de esta entrega, asumió que si el equipo no conseguía implementar de forma correcta estos animales dentro del juego, los eliminaría.

Esta dura decisión se tomó a modo de ultimátum en una de las reuniones entre el equipo directivo y los desarrolladores principales. Para Howard, lo más importante de Skyrim eran los dragones, la exploración y jugar como quieras, por lo que si los caballos se llevaban demasiada atención, no tendría problemas en eliminarlos por completo.

Lianne Cruz acaba destacando lo decidido que estuvo Todd Howard durante todo el desarrollo y lo importante que eran las decisiones más serias para el buen desempeño del juego. La propia animadora añade, en tono jocoso, que también trabajó en la animación de otros animales sin mucho problema, pero era la interacción entre el personaje y los caballos lo que más quebraderos de cabeza supuso al equipo.