Nuestros 6 ratones inalámbricos favoritos para jugar en PC

Que el ratón es el periférico de entrada más importante de nuestro escritorio es una afirmación que seguro que no pilla por sorpresa a nadie. Nosotros mismos hemos realzado la importancia del ratón por estos lares en varias ocasiones. Una práctica necesaria dada su terrible importancia para el PC Gaming.

Su importancia radica en la propia naturaleza analógica del ser humano. Una frase que, lejos de ser trascendental, viene a decir que, por cómo interaccionamos con nuestro equipo, cosas tan banales como la forma del propio ratón influyen tanto a su rendimiento de un jugador a otro como factores como su sensor o sus materiales.

Por esta razón es relativamente difícil recomendar un ratón "a ciegas" y decir que es bueno para todo el mundo; pero sí que podemos establecer ciertas pautas que nos den una base sólida y objetiva sobre la que elegir modelos que sean una recomendación sólida. Ese es el propósito de este texto, en el que queremos centrarnos en ratones inalámbricos, y hablaros de algunos de nuestros ratones favoritos para jugar en PC.

Un largo camino recorrido ¿Por qué optar por un ratón inalámbrico?

Casi tan antiguos como el propio periférico, los ratones inalámbricos llevan mucho tiempo en el mercado, pero no ha sido hasta hace unos años cuando hemos comenzado a ver una buena variedad y disponibilidad de estos modelos en el mercado de consumo. Menos aún si lo delimitamos a los ratones para jugar.

El sueño de prescindir de los cables en nuestro escritorio ha dado lugar a varios experimentos a lo largo de los años, pero no sería muy atrevido decir que hasta la aparición de modelos como el G900 de Logitech no se comenzó a mirar con buenos ojos a los roedores inalámbricos como opción viable, especialmente gracias a la profesionalización de los periféricos de juegos y la fiebre por lo Gaming.

Los motivos de ello son diversos, pero problemas de precisión, estabilidad, precio, y batería en los modelos inalámbricos son buenas referencias de ello. En la actualidad se han solventado prácticamente todas ellos, dejando a los ratones inalámbricos más como una opción con sus propios pros-y-contras que una lista de concesiones para dejar atrás los cables. Los modelos inalámbricos modernos son ligeros, accesibles y, en muchas ocasiones, más rápidos en términos brutos que sus homónimos de cable.

Nuestros modelos inalámbricos favoritos

Para no dar más giros antes de entrar en materia, vamos a mostrar ya nuestros ratones inalámbricos favoritos. Huelga decir que, a diferencia de otras ocasiones, no hemos dispuesto a los ratones en ningún orden particular. Todos los modelos aquí listados nos parecen excelentes por méritos propios.

También hay que decir que todos estos modelos nos parecen destacables para el grueso de los jugadores, pero en este texto no pretendemos ayudaros a escoger vuestro ratón ideal, eso ya lo hemos explorado en otras ocasiones. Sin más dilación, estos son los modelos:

Razer Viper Ultimate

Razer tiene a su disposición una buena oferta de ratones para jugar, muchos de ellos inalámbricos y también muchos de ellos de gama alta. Dentro de estos últimos, nuestro ratón favorito no ha de ser otro que el Razer Viper Ultimate; el ratón estrella de la marca de la víbora tricéfala, que nos conquista por sus potentes características.

De entre ellas una de las más interesantes es su construcción. Estamos hablando de un modelo ligero para ser inalámbrico, con unos 74 gramos de peso, que se las arregla para alcanzar dicho peso manteniendo un chasis uniforme lejos de las perforaciones o famosos hexágonos. El chasis en sí es simétrico, tanto en disposición como en agarre, algo que lo convierte en un modelo amigable para todo tipo de agarres.

Posiblemente su pieza más destacable sea su sensor 8K de Razer, derivado del PMW 3399 de PixArt, uno que le otorga una precisión excelente manteniendo unos niveles de autonomía aceptables con una batería de unas 70 horas de uso continuado. Extras como los interruptores ópticos o sus pads de deslizamiento de teflón redondean su propuesta.

De entre los muchos ratones que he probado a lo largo de mi corta vida, este modelo es mi elección para el día a día. Hay modelos que me gustan tanto cómo esta opción de Razer, otros incluso que me parecen más interesantes. Pero hay tanto de bueno en este modelo que rara vez lo dejo fuera de mi escritorio. Por ello, he querido destacarlo aquí.

Logitech G305 LIGHTSPEED

Cuando Logitech lanzó su famoso G203 Prodigy al mercado tal vez no fuéramos conscientes de lo redonda que resultaba la idea de coger el factor de forma del G Pro original y lanzarlo en un formato más asequible, con un buen sensor que lo respaldara. Varias iteraciones después tenemos ante nosotros a uno de los ratones inalámbricos favoritos, sucesor sin cable del mencionado G203.

El resultado es el G305 de Logitech, un ratón con un factor de forma pequeño y angulado que lo convierte en un candidato ideal para quienes usen un agarre de dedos o garra, incluido mixtos de ambos. Alimentado por una única pila AA el modelo alcanza unos 96 gramos de peso con ella equipada, cerca del límite de lo que consideraríamos aceptable.

Para acompañar a este fantástico factor de forma, Logitech ha decidido usar un sensor Hero Lightspeed, una iteración moderna de su sensor inalámbrico estrella, que aún a pesar de contar con ligeras limitaciones para alejarle de modelos más caros, cuenta con una precisión excelente. Todo ello, junto a su precio, hacen de él una recomendación sólida.

Es difícil sacar pegar al G305 más allá de su peso. Su tamaño reducido lo puede hacer una mala opción para jugadores con un agarre de palma y manos grandes. Su construcción es excelente para su precio, y el problema del peso puede solventarse levemente con un pequeño mod. Uno de mis modelos favoritos, sin duda.

SteelSeries Aerox 3

Si no tienes problemas de tripofobia y buscas ratones de bajo peso, este tipo de modelos es donde se ha puesto mayor énfasis en el último año dentro del mercado de los ratones inalámbricos, dando lugar a un oferta sólida e interesante de estos modelos. De entre todos ellos, hay un ratón en concreto que nos gusta especialmente: el SteelSerires Aerox 3, uno de los modelos más recientes de la mítica compañía.

Buena parte de este gusto por éste modelo viene de su factor de forma heredado directamente del nuevo Rival 3 de la compañía, así como del uso del mismo material y acabados que este ratón. Esto le confiere un agarre excelente para quienes usen su ratón en garra, uno de los más habituales entre jugadores de shooters, manteniendo un peso inferior (66 g) al susodicho Rival 3 Wireless y otras alternativas con este factor de forma.

La aparición del renovado sensor TrueMove Air de SteelSeries, revisión del PMW 3399 de PixArt, hacen que su pequeña batería interna tenga una autonomía endiablada para su peso y tamaño, especialmente si prescindimos de la iluminación de este modelo. Estando actualmente por debajo de los 90 euros de precio, se nos antoja como una de las opciones ligeras más interesantes.

El único punto flaco real de este modelo de SteelSeries son sus pads de deslizamiento, algo deficientes para un ratón de tantísima calidad, especialmente por su precio. Por su precio actual creo que desbanca con soltura al Glorious Model O Wireless y otras propuestas de bajo peso, razón por la que lo he destacado.

Roccat Kone Pro Air

Hay algunas compañías de periféricos que se sienten cómodas jugando en torno a sus propias reglas. Este tipo de propuestas no suelen triunfar por su incapacidad de encontrar un público dispuesto a comprar, pero si estamos hablando de Roccat la cosa cambia. La empresa de origen polaco tiene en su haber muchos periféricos peculiares, pero dentro del sector de los ratones inalámbricos queremos destacar uno: el Kone Pro Air.

Lo peculiar de este ratón viene en buena medida por su construcción, con un factor de forma con un claro énfasis en su faceta ergonómica, el modelo se siente firme en mano con agarres de garra o palma, algo para lo que también ayuda su relativo gran tamaño. La estructura del modelo, con un chasis de honneycomb cubierto por una estructura plana, hacen que pese en torno a los 66 gramos, un peso excelente para su tamaño.

Otros elementos del ratón, como sus interruptores ópticos, su compatibilidad nativa con Nvidia Reflex, sus pads de PTFE de bien tamaño, o su sensor Owl-Eye 19K hacen del conjunto de este ratón una opción excelente por su lista de características, siempre y cuando podamos encontrarlo a un precio aceptable.

Roccat es una marca de periféricos a la que es difícil no tener cierta simpatía por su intención de ser distinta. En un mercado en el que los ratones simétricos de interruptores mecánicos triunfan, los polacos proponen un modelo ergonómico de gran tamaño con interruptores ópticos. El único punto flaco de este ratón, para mí, es su precio de venta habitual, de unos 130 euros. Por suerte suele estar rebajado.

Razer Basilisk X Hyperspeed

El lanzamiento del Basilisk original por parte de Razer fue algo controversial por su similitud con el G502 de Logitech, una relación que aún hoy, cuatro versiones después, se sigue haciendo. Sin embargo, en el sector de los ratones inalámbricos, hay menos que comparar entre ambos modelos, porque la propuesta de los de la víbora tricéfala es el Basilisk X Hyperspeed, un modelo relativamente ligero centrado en el low-cost de alta eficiencia que nos gusta.

La característica reina de este modelo es, sin lugar a duda, su factor de forma heredado del Basilisk original, que tiene a bien incluir ciertas mejoras que encontramos en el V2 de Razer. Con un chasis relativamente elevado y con buen volumen, este modelo es idóneo para agarres de palma o garra, especialmente de aquellos que gusten de modelos ergonómicos.

Para acompañarlo, el sensor Hyperspeed de Razer es un gran aliado de sus modelos inalámbricos más básicos, por contar con una excelente precisión y autonomía inalámbrica, una que nos llega a través de una única batería AAA que usa el modelo, prescindiendo de extras como iluminación en el proceso. A cambio, encontramos unos botones excelentes y un buen pad de deslizamiento.

El Basilisk X es un razón centrado en ofrecer una buena experiencia de uso inalámbrica sin costar una fortuna, algo que agradezco mucho en un mercado en el que aún cuesta encontrar opciones asequibles y modernas. Sin embargo, debemos tener en cuenta que se trata de una versión descafeinada del Basilisk en todos los sentidos.

Logitech G Pro X Superlight

El G Pro Wireless es un ratón excelente, que nos gusta por muchos motivos, pero que se ha visto, a nuestros ojos, desplazado por una opción más centrada y moderna proveniente de la propia marca de origen sueco. El modelo en cuestión es el G Pro X Superlight, la versión de bajo peso del modelo de Logitech, que además es uno de los ratones más usados por los profesionales en la actualidad.

Aunque las comparaciones son odiosas, es más fácil entender este modelo si lo comparamos a su versión original. El Superlight es más anguloso en mano, con un chasis que prescinde de los elementos de simetría para hacerlo algo más accesible en mano para los usuarios de agarres de palma. Sin embargo, viendo del chasis del que viene, serán los de garra o dedos quienes lo encuentren como un guante.

Cuenta con el sensor Hero 25K de la compañía, posiblemente el mejor sensor de alto rendimiento actual para ratones, así como un peso de tan sólo 63 gramos, un chasis reforzado, y posiblemente los mejores botones mecánicos de toda la serie Pro de Logitech, así como algunos de los mejores pads de deslizamiento que ha usado la compañía, una cuenta pendiente para muchos.

En muchos sentidos, el G Pro X Superlight es el mejor ratón del mercado. Su peso para un inalámbrico es imbatible, su construcción mejora drásticamente desde el G Pro Wireless, y su factor deforma es más cómodo y esbelto que el de su predecesor. Detalles como la insistencia en el micro-USB por parte de Logitech son sus únicos puntos flacos para mi.