El CEO de Intel es optimista sobre el futuro de la compañía: "el dominio de AMD acabará con el lanzamiento de Alder Lake"

Ayer mismo os contábamos que en base a una encuesta de hardware, los procesadores AMD habían ganado terreno a Intel y había aumentado su uso en un 2.84% en septiembre, además de ganar alrededor de un 9% de la cuota de los ordenadores a Intel. Pues bien, parece ser que la tendencia lenta de AMD en su crecimiento en el dominio de CPU acabará, según el CEO de Intel, Pat Gelsinger.

En una entrevista con CRN, afirmó estar muy optimista sobre el futuro de Intel y sobre el propio crecimiento de la empresa, además de hablar de otras competencias como AMD o Apple. Al inicio de dicha entrevista, se le preguntó cómo se llegaría a defender Intel ante los productos de los competidores y del mercado de los ordenadores de sobremesa, a lo que respondió: "Haciendo mejores productos".

El final del dominio de CPU con AMD

Fue en junio cuando comenzaron los rumores y pequeñas filtraciones sobre los próximos Alder Lake-S de Intel que llegarían al mercado a finales del mes de octubre. El objetivo de Intel ha estado claro desde el principio, liderar los equipos para juegos y, claro está, dominar el mercado de las CPU. Ahora bien, esto último se confirma con las palabras del CEO de Intel cuando le preguntan sobre el dominio de AMD en CPU: "AMD ha hecho un trabajo muy sólido en los últimos años, pero eso ya se acabará con el lanzamiento de Alder Lake y Shapphire Rapids".

Es probable que esté tan seguro de esto, debido a que Gelsinger es ingeniero y es probable que sepa de primera mano lo que pueden ofrecer los chips de 12th generación, lo que deriva al gran éxito que prevé con Alder Lake, dejando a AMD en segundo lugar. Por otro lado, Shapphire Rapids es el servidor equivalente de Alder Lake y que también se espera que se convierta en un buen negocio.

Ahora bien, y lo más importante, la demanda de componentes sigue siendo una lucha constante a diario, y con un 50% del mercado mundial de condensadores de aluminio afectados, todas las CPU tendrán un golpe adicional que posiblemente dure hasta 2023. Asimismo, Windows 11 ya está disponible con una gran actualización que está ligada al lanzamiento de los procesadores Alder Lake-S.