Volver a Sea of Thieves es un gustazo. Te lo pasas bien jugando con amigos, siempre hay algo nuevo que hacer y en ningún momento sientes que te estás quedando atrás, porque el equipamiento es idéntico para todo el mundo, no hay sistema de niveles ni nada parecido. De hecho, desinstalé el juego tras llevarme unas sensaciones agridulces de lanzamiento y cuando volví con un grupo de colegas tres años después, me enganché como un condenado.
Es lo que tiene que las actualizaciones estén ahí casi exclusivamente para mejorar el sandbox —ya sabes, el conjunto de físicas e interacciones de la IA y elementos como el fuego o la lluvia— y en ese sentido, hasta ahora lo más interesante que ha publicado Rare para el juego es la actualización de aniversario, o Anniversary Update por la nomenclatura original. Repito: hasta ahora.
Creo que no es ninguna locura afirmar que la conferencia de Microsoft y Bethesda fue la mejor del E3 2021: tuvo muchos juegos, buen ritmo, buenas IP y hasta material gameplay para los lanzamientos más cercanos como Halo o Forza. No faltó a la cita Sea of Thieves con el anuncio de A Pirate's Life, una expansión que acompaña al estreno de la temporada 3, y que al mismo tiempo es también un crossover con Piratas del Caribe. ¿Mucha información para digerir? No te haces una idea.
A Pirate's Life es más que Jack Sparrow
Unos días atrás, tuve la oportunidad de atender a un evento de presentación junto con otros medios de prensa, la mayor parte del cual está ahora disponible para todo el público a través de Youtube. La sensación que tuve al acabar fue de que tal vez muchas personas no se hacen aún a la idea de lo enorme y transformativo que resulta este contenido. Que el mismísimo Jack Sparrow se una a tu tripulación ya es una novedad enorme, sí, pero no es en absoluto la única.
Si tienes más o menos al día el trasfondo y los contenidos de Sea of Thieves, te sorprenderá saber que en esta nueva versión es posible visitar los dos reinos restantes de su universo de fantasía: Sea of the Damned y The Sunken Kingdom. Además, las criaturas que aparecieron en el tráiler del E3 2021, junto al cetro y las estatuas, pasarán a formar parte del sandbox al igual que otros muchos elementos que llegaron con parches en el pasado, como los botes que puedes amarrar a los barcos. Después de tres años machacando a los mismos esqueletos, cualquiera apreciará ese cambio.
Rare no discrimina a nadie. Si entras a jugar hoy, tienes a tu disposición el mismo contenido que tu amigo "viciado" que lleva jugando sin parar desde el primer día. Puede que él lleve orgullosamente el título de Campeón de la Fortuna de Atenea y tú no, pero en lo que a mecánica se refiere, sois idénticos. Con una filosofía tan amable y pacífica como esa, que ya quisiera yo ver también en mis juegos favoritos, no es de extrañar que los padres de Bajo & Kazooie hayan organizado A Pirate's Life de tal forma que cualquiera pueda disfrutar de sus novedades desde el primer minuto.
Empezando a jugar los nuevos contenidos
Rare gestiona todo con naturalidad, de hecho, llevando a todos los puestos de avanzada un nuevo personaje (siguiendo un poco el ejemplo de Larinna) que gestiona el progreso de los cinco grandes relatos que componen A Pirate's Life. Sin embargo, puedes hacerte a la idea de a dónde tienes que ir y qué tienes que hacer en todo momento gracias a un cuaderno de viaje que se añade a tu inventario a modo de guía, y personalmente es algo que agradezco porque creo que todos los que entran a Sea of Thieves por primera vez lo hacen despistados, como diciendo "vale, tengo un barco, ¿y ahora qué?"
Si más o menos has prestado atención al vídeo sabrás que en la primera de estas misiones toca viajar entre mundos para encontrar a Jack Sparrow en Sea of the Damned, encerrado en una fortaleza rodeada de piratas fantasmales poco amistosos; y en la segunda, el objetivo es encontrar la brújula del pirata más famoso en lo que queda de la Perla Negra, el barco encadenado en lo más profundo de The Sunken Kingdom. Todas estas aventuras suenan emocionantes por sí mismas, pero son mejores cuando entiendes que no se conforman con darte sencillamente más cosas que hacer.
Más bien, son experiencias muy bien diferenciadas de todo lo que estábamos acostumbrados a ver en Sea of Thieves a día de hoy. O casi todo. Por ejemplo, la fortaleza y la ciudadela de Sea of the Damned están inspiradas en las películas de Piratas del Caribe (como no podría ser de otra manera) pero también en la atracción homónima de Disneyland. Si la conoces, encontrarás muchos paralelismos entre esta y los personajes que complementan el decorado, así que hay rasgos visuales muy distintivos. Con el reino sumergido, el lugar del que provienen las sirenas, pasa algo parecido.
Sirenas, crustáceos, fantasmas, estatuas, anguilas... hay varios enemigos nuevos para reforzar el espectro PvE de Sea of Thieves que llegan en la temporada 3
En él encontramos plantas submarinas que emiten burbujas de oxígeno para que puedas permanecer bajo el agua durante mucho más tiempo de lo normal, y eso que Sea of Thieves siempre ha sido generoso en este aspecto. Pero también aparecen rompecabezas, sistemas mecánicos que se pueden alterar a placer para acceder a diferentes lugares. Como un ascensor, pero más complejo. No sé qué "sabor" tendrán las tres últimas misiones de la campaña de esta expansión, pero tengo claro que estarán bañadas de ese carisma tan curioso que está consiguiendo Rare.
El nuevo panorama de Sea of Thieves
Al final del día, creo que lo que los fans de Sea of Thieves queremos es precisamente ese componente de variedad y personalidad. El juego está hecho de tal forma que cualquier viaje que hagas con amigos se siente divertido porque pueden pasar un montón de cosas únicas, historias que luego cuentas a otros amigos, pero si todo se reduce a ir de una isla a otra y cavar en la equis, pues lo mismo terminas sintiendo que "el verdadero tesoro son los amigos que haces por el camino". Que no es mentira, vaya, pero ideas tan distintivas como luchar finalmente con el kraken cara a cara suenan más emocionantes.
Personalmente, lo que más me emociona de A Pirate's Life es saber que estas novedades van a tener un peso muy grande a largo plazo: el sandbox se ha enriquecido en gran medida gracias a la aparición de nuevos enemigos controlados por la IA, pero Rare también ha desarrollado cantidad de recursos (corales, piedras, estatuas y más) que puede reutilizar para expandir aún más localizaciones inexploradas y completamente únicas como son las dos nuevas.
Tras las cortinas también hay cambios interesantes como los mapas instanciados, que aquí se usan para que nadie te arruine la experiencia mientras juegas a los grandes relatos, que suenan bien de cara a posibilidades futuras. Mientras tanto, tocará exprimir los logros y recompensas asociados con los nuevos contenidos, y más allá, ver cómo impactan en las actividades pretéritas los nuevos oponentes. Quiero decir, combatir a los Ashen Lords rodeados de enemigos eléctricos debe ser toda una experiencia.
Y ni digamos de blandir el cetro de las Mareas Oscuras en plena batalla naval contra otros jugadores, por ejemplo. Sea of Thieves tiene una forma muy particular de crecer porque lo hace en todas las direcciones al mismo tiempo, sumando y nunca restando, mientras otros juegos que —respetablemente, por supuesto— se "conforman" con alimentar aún más los contenidos que ya tienen. Creo que si Rare nunca hubiese actualizado su querido juego de piratas, un hipotético Sea of Thieves 2 sería muy parecido al juego que tenemos hoy. Solo que lo hemos tenido gratis, poco a poco.
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