Que Hogwarts Legacy triunfe tiene un lado malo para sus autores

Hogwarts Legacy está a menos de 10 días de llegar a nuestros PCs. Si como yo tenéis la espinita de no haber recibido la lechuza con la esperada carta del colegio mágico, que sepáis que la libertad que nos dará el juego promete ser brutal. No obstante, pensando en su estudio de desarrollo, Avalanche Software, éstos no lo tienen todo consigo. Sí, petar les llevará a la cima, pero también los condenará al universo de Harry Potter.

La cara B del éxito de Hogwarts Legacy

Suena, ciertamente, preocupante, pero es algo en lo que llevo pensando varios días. No es la primera vez que un estudio pequeño, que incluso su historial no es muy halagüeño, nos sorprende con un "melocotonazo". Rocksteady Studios, por ejemplo, hizo Urban Chaos: Riot Response, un shooter de policías que tampoco despuntó en demasía; para luego desquitarse —tampoco tenían por qué pedir perdón, su juego no hizo daño a nadie— con la trilogía Batman: Arkham.

Avalanche Software, previo al lanzamiento el próximo viernes 10 de febrero de Hogwarts Legacy, solo habrá firmado Disney Infinity y algún que otro desarrollo menor bajo el paraguas de Walt Disney Studios. Esto no quita mérito al trabajo realizado, ni mucho menos, y en caso de que salga bien, demostrará el valor del estudio; aunque también es muy probable que lo encasille en el universo Harry Potter.

Con Hogwarts Legacy hablamos del primer gran juego del mago. Voy más allá, la primera producción de calidad de Harry Potter. Hasta la fecha, solo LEGO, bajo ese humor simpático tan característico, consiguió sacar ligeramente a la licencia británica del atolladero. Cuando Avalanche Software demuestre su valía, es de esperar que Warner Bros. blinde al equipo utaheño y delegue en ellos el futuro más que probable de la saga en el videojuego.

Dicho así suena muy negativo. Casi como si los pobres desarrolladores estuvieran atados de pies y manos, obligados a ver y leer Harry Potter hasta el final de sus vidas, pero sí que puede limitar un poco la creatividad del equipo. Voy más allá, y es que la obra y universo del joven mago no es extrapolable a géneros muy diversos. Está casi condenado a la aventura y la acción como pilares de su experiencia. Por lo que sí, en cierta manera, estarán "penados" a repetir lo mismo.

Por otro lado, ¿Avalanche se sentirá mal por esto? Van a firmar el primer AAA de su vida, y el primero de este año 2023. El Wizarding World les va a encumbrar a lo más alto durante mucho tiempo. Aun así, quizá nunca veamos su potencial más allá de las cuatro paredes escritas por J.K. Rowling.

¿Hay ejemplos de esto?

Bastantes, de hecho. Podemos pensar en, por ejemplo, Naughty Dog replicando su formato de experiencias cinematográfica, y que no son sino aventuras en tercera persona, con mecánicas shooter guiadas por una narrativa potente. Sin embargo, los de Santa Mónica no están encasillados bajo unos estándares predefinidos, ni mucho menos.

El ejemplo más claro, y uno que me apena traer aquí, es el de DICE. Los suecos llevan más de una década enfrascados en Battlefield, y no hay nadie que los saque de allí. Me gusta pensar en esta saga y en Call of Duty como proyectos que buscan desesperadamente romper el molde; quizá con campañas algo más sesudas; puede que mediante un multijugador algo "diferente"; pero el poder de la marca a la que están ligados es muy bestia. EA ya aseguró que DICE no probaría suerte más allá de este formato, y que Mirror's Edge Catalyst sería su último "experimento" lejos de aquí.

Al otro lado del mundo también hay ejemplos muy buenos como el de Camelot Software Planning. La second-party de Nintendo, afincada en Tokyo, ha estado "secuestrada" por las locuras deportivas de Mario desde 1999. Solo en 3 ocasiones (de los 20 juegos desarrollados desde entonces) los tokiotas se han separado del bigotudo fontanero, y es una IP con nombre y apellidos: Golden Sun.

¿Y si Avalanche no triunfa con Hogwarts Legacy?

Es probable, los de Utah no lo tienen todo seguro a pesar de que el juego está cabalgando la ola del éxito en Steam y demás plataforma. Quizá es más seguro el caso positivo, porque lo tenemos mucho más presente con ejemplos como los de arriba. El panorama si no triunfa, al menos en opinión, es algo más difuso; difícil de masticar diría yo teniendo en cuenta que económicamente es probable que Hogwarts Legacy ya sea rentable para Warner Bros.