Unity, la compañía dueña de uno de los motores gráficos más populares, últimamente no deja de estar en el centro de las polémicas. Tras su controvertida compra de IronSource, los padres de un software conocido por traer consigo malware, el CEO de la compañía también se ha visto entre la espada y la pared por sus recientes declaraciones.
Llamar "malditos idiotas" a los clientes de la compañía que no aprovechen todas las opciones de monetización que puedan para sus títulos puede parecer algo excesivo, pero es exactamente lo que ha pasado. Como contábamos hace unos pocos días, John Riccitiello ofendió a la industria con sus palabras durante una entrevista con PocketGamer.biz.
Como es de esperar, estas palabras tan contundentes como salidas de tono no sentaron bien ni a los desarrolladores, ni a la propia comunidad. Ambos colectivos quisieron expresar su descontento, y parece que es algo que desde la compañía no han podido ignorar, pues tenemos una respuesta al respecto.
A través de un comunicado publicado en su cuenta de Twitter, Riccitiello ha abordado la polémica pidiendo perdón. "Lo que estaba intentando decir, y claramente no pude trasnmitir, es que hay mejores maneras para que los desarrolladores sepan lo que los jugadores piensan de sus juegos en un momento temprano. Hay que aprender de su feedback y, si los desarrolladores quieren, hacer ajustes basados en esto. Escuchar y actuar o solamente escuchar es una elección. De nuevo, ambas son igual de válidas.", dice el ejecutivo.
Pese a la disculpa, parece que las aguas están lejos de calmarse. Un vistazo por los comentarios y los retweets a la publicación deja claro que una mayoría vocal de usuarios sigue molesta con las declaraciones y la dirección actual de Unity. El futuro de este motor pinta más negro que nunca, pero todavía tienen tiempo para corregir su curso y volver a ganarse la confianza de la gente.