Assassin's Creed sigue y seguirán siendo la franquicia predilecta de una Ubisoft falta de grandes lanzamientos. Con 2022 siendo un año para olvidar, la franquicia que vio nacer un duelo a muerte y por los siglos de los siglos entre hombres encapuchados y la Iglesia católica, buscará llenar los huecos del calendario al menos durante un lustro. Assassin's Creed Mirage es el primero de los lanzamientos que llegarán a partir de 2023, y curiosamente tendrá un personaje algo mal, mentalmente hablando.
Si habéis jugado a Assassin's Creed Valhalla, el mayor éxito reciente de la saga para Ubisoft con nada menos que 2 años de contenido sin parar, conoceréis a Basim. El secundario de aquella historia de Eivor es ahora protagonista, aunque con varios años menos. No obstante, el maestro que vimos no es sino una versión más madura, y es que según Jean-Luc Sala, director de arte de Ubisoft Bordeaux, es "un gánster con problemas mentales".
Hablamos de una llamativa forma de llamar al protagonista de tu historia, pero con el Joker como el mayor gánster con problemas mentales, es casi un alago e, incluso, un espejo en el que mirarse. No, no creemos que Basim sea capaz de las tropelías más locas del personaje de DC, pero "es un poco engreído y está descubriendo que tiene problemas mentales y dudas".
Un punto de partida muy interesante para un personaje que no se presentó como un héroe salvador en AC Valhalla y que aquí promete ser un lienzo en blanco con decisiones algo cuestionables. Al fin y al cabo, estamos frente a un coming-of-age, una aventura donde veremos a Basim crecer desde los 17 años como un joven conflictivo, a una figura más madura al final de su historia.
De hecho, Jean-Luc Sala ha dado otro dato muy interesante sobre el enfoque de la historia. Estamos ante un “entorno histórico, más arraigado, menos mitológico”, algo que busca desligarse del potente apartado mágico y místico de las entregas pasadas para un lanzamiento previsto para algún momento de 2023.